En el crepúsculo
de su aleteo
cae la mariposa,
tristemente
colapsada por un sueño,
aquel que si tenía dueño
y no era especificamente
de ella.
Un beso
fue el remate de las flores,
no podía siquiera
contener su tristeza,
fue de las peores
que recuerde esa mañana,
que las campanas
sonaban traicioneras.
La despedida
de a poco la comía,
no lloraba más
que su vida entera,
vio morir de a poco quimera
y fue la última vez
que desprendio su aleteo.
Ahora la cama
la encunetra distendida
perdida en un sueño que no existe
y si no la viste,
no la busques.
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1 comentario:
pensa lo qe qieras
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