A veces no hay quien espere,
a veces no hay qué esperar,
vale tanto la vida,
vale tanto la muerte
y es tan trizte la eternidad.
No quiero dejar solo una imagen,
es muy mediocre querer figurar,
vale tanto la fatiga,
valen tanto mis amores
y es tan absurda mi ansiedad.
Fala mucho para peinar mis canas,
y mis pies no voy a arrastrar,
vale tanto lo que quiero,
vale tanto gritar
que he dejado mi garganta
con muchas ganas de llorar.
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1 comentario:
hola amigo....que buena excusa su visita para poder reencontrarlo...
vea,
no
se
me
angustie...
valen tanto sus amores...
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