Yo no espero
cuentos infantiles,
muchas vueltas
o crisis de misiles,
no quiero mentiras
ni que seas sincera,
no quiero que tú
no valgas la pena.
Y si la noche amaga
y las luces se apagan
sin tener celos,
deja que encienda tu alma
y mate tu calma
quemandola a besos.
Extravíate de mi vista
y regresa pronto,
deja que te extrañe
aunque sea un poco,
sé algo de mí
que nadie haya sido,
sé algo que nunca fué
y que ya he perdido.
Lávame los ojos
y humedese mis lágrimas,
no lo hagas tan serio
ni tampoco una sátira,
deja una vez tu ropa
al borde de la cama,
ya dime te quiero
y no me digas que me amas.
Y si la noche amaga
y las luces se apagan
sin tener celos,
deja que encienda tu alma
y mate tu calma
quemandola a besos.
Y si la madrugada llega
tan bruta como ciega
no des explicaciones,
que para tu retirada
y tu dulce mirda
estan mis canciones.
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