El sexo esta mal

Ni dopado ni obcseno
me atrevo a afirmar
que los horrores del hombre
son debido a la lujuria
y el libido.
Es así que el sexo
mueve a los horrendos
como el viento a las hojas,
es así que el cuero
pide más sangre que libro,
porque el placer no tiene precio
y al parecer no se vende
por nada,
ni siquiera por una vida.
Es un tanto cruel
llegar al spupuesto
de que estamos tan embarrados,
sin más remedio que el tiempo
(si es que el tiempo contiene
vitaminas para el corazón)
sin más esperanza
que trozos de quimeras esparcidas.
Y por esto,
por la simple devolución
que nos da la civilisación,
simple y desamparada,
simple y poco útil
es que uno no debe dejarse
llevar por las corrientes.
Saltar por un abismo
si es necesario para ser único,
volar en mil pedasos
un cuartel de mala muerte
y varios acondicionadores,
sembrar una semilla
que crezca hasta en el desierto
menos fértil y más
caluroso o más
frío.
Es que el lujo
que al fin y al cabo propone
en estos tiempos de perdidos
quien es nuestro emperador,
no son más que medios
para tener mas coitos
con mujeres mas falsas
y supuestamente bellas.
Es tan así
que en ciertas tribus desconocidas
no es el hambre ni el ocio
lo que les preocupa,
no es la salud ni la educación
un problema para ellos,
pero si traman caprichos
para tener más
y más y más y más,
y con ello el sexo
el sexo y el sexo.
Triste es la idea de pensar
que la cosa más hermosa
que una persona pueda conocer,
sea el motivo para tantas
atrocidades.