No te culpo

Te tengo presa
como quien encierra a un canario
en una pequeña jaula,
presa porque no puedes
aunque quieras
liberarte de mi imagen
sonriente y serena,
aunque tu quieras
sentirte más que yo
o aunque quieras
pensar que no estoy ahí,
te es inevitable
acudir a mi ayuda
para ser un poco menos trizte
y un poco más apacible.
No te culpo,
si hay algo que aprendí
en mis días de cazador,
es que no hay bestia tan salvaje
que no se pueda matar.
Hoy te desangras por dentro
porque me fui de la casa
en donde se encuentra tu jaula,
porque te sientes sola
pese a la nueva compañía
y repito que no te culpo
por querer volar a mi cama
donde sabes que puedes ser feliz.