viernes, 18 de junio de 2010

Reflexión de un Joven en la elección de una Vida

Así,
como un presagio,
las palabras vuelan
justo al lugar donde deben llegar,
visten de seda sus armas
para matar la esclavitud
y reducen en escombros
la represiva costumbre
de la ignorancia.
La vida,
aunque hecha polvo esté
no puede abandonar
los aires nobles que habitan
en la felicidad:
¡sea mi polvo sabiduría de todos,
pues ni hecho polvo solo estaré!.
Si solo se buscara la grandeza,
la perfección y la alegría,
seríamos un ejemplo para dios,
pero sin embargo
nos situamos abajo,
humillados y gastados,
cautelosos esperando sus maravillas
o su misericordia,
y entre tantos ombligos gordos
solo provocamos la mofa
de un padre que no nos reconoce.
Entonces mírese
la cara buena de nuestra existencia,
la pura y dicha verdad,
no somos más que animales
que le temen de mil maneras
a la soledad,
no somos más que un grano de arena
que solo quiere ser parte del arenal,
cuánta gloria escondida
en las profundidades de la humanidad,
ya es hora de no ser testaferro del egoísmo
y merecer un poco más la perfección.

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