Idilio rebelde

Como un símbolo itermitente
se posa en el alto
del arcoiris de la gloria,
haciendonos arder el corazón
a fuego lento
tan solo con historias que transgrueden
generaciones,
y un encare a la vida
muy particular,
en la más santas de las acciones
y en la más feroz de las decisiones.
Tenemos su figura casi como un imposible,
una estrella en el profundo agujero
de la deshasón, cuando con su compañero nos enseñan
a como desatar nudos
que nos ahorcan desde el alma hasta el cuello,
y nos deja pobres, abandonados,
mientras algunos pocos se enriquezen con ese nudo,
que cuando trato de verme en sus ojos
le agarro odio sideral,
y trato de aprender un poco más de ese hombre,
que de la vida, tanto me ha enseñado,
a pesar de que no lo haya conocido,
a pesar que de repente, no se tanto de él,
pero avergonzado al mirarme en los lujos de mi vida
que no son tantos, trato de por lo menos,
ser un poco más como él.
Fue una persona especial, es un espectro de luna,
estrella, planeta, sol, vida, hombre, mujer,
lucha, todo, y se que como él no voy a ser,
ni tampoco lo pretendo, pero sí
ser aceptado a su juicio, cuando a la vida me toque encarar
y no me aisle en un rincón a servirme
de vida, si los de al lado,
como palomas tristes
caen en el intento
de darle a la vida, un fruto de felicidad.
No supe, no sé, ni sabere como encarar
de forma ideal un poema
que mi admiración a él refleje,
pero eso no importa tanto,
solo quiero al fin de mi viaje
poder mostrarme en un funebre y feliz final,
orgulloso de que fui parte de algo,
que mi mirada fue más alla de lo que alguna
vez pude haber pretendido,
que me sirvió de estrella
en este viaje tan lleno de conflictos
y de malos y estúpidos farsantes,
que al doble discurso apelan
tratando de hacernos olvidar
de todo lo malo que hicieron,
y lo peor, es que hay gente que se lo cree.
En Bolivia lo sentensiaron un 9 de octubre,
y al espacio con Marx y Lennin se fue a encontrar,
mientras observan a su cumpañero
que en cuba todavía luchando está,
nos mira a todos a los que su ejemplo
tratamos de marcar.
No pretendo hacer una aplogía a un ángel
ni nada por el estilo,
pero necesito dejar plasmado
un sello de la historia del hombre,
una deuda pendiente contra la muerte
que se llevó a uno de los mejores hombres
para darnos un grito más a la gente,
hoy te dedico esto che amigo,
aunque estas palabras puedan sonar a un idilio rebelde,
siguiendo tu huella trato de encontrarme,
y hasta la muerte mi guía serás.